by Finca Don Silvano

 

Esta finca debe su nombre a Don Silvano Bonilla Rodríguez quien fuera un gran empresario y exportador cafetalero de la región, en sí el líder cafetalero más fuerte de Coatepec en los años 50 ́s.

Esta propiedad perteneció en sus orígenes a una de las primeras haciendas de todo el territorio mexicano denominada SAN PEDRO BUENAVISTA.

La historia comienza en 1547, cuando el primer virrey de la Nueva España, Don Antonio de Mendoza, le regala al español Pedro Acosta, 6000 hectáreas que denominarían San Pedro Buenavista, poniendo como su primer cultivo caña de azúcar.

En 1593 esta propiedad pasa a manos de Francisco de Orduña Barriga, del cual toma su nombre años después, por la popularidad de este personaje, siendo mas conocida como Hacienda La Orduña.

Con su hijo Diego de Orduña Loyando, amplían la propiedad hasta tener 9000 hectáreas. Bajo este terruño, pasa esta hacienda, aún en propiedad de esta familia 5 generaciones más, para que en propiedad de Don José Velázquez de la Cadena sea vendida en copropiedad a Pedro López Gómez y el capitán José Arias y Torija.

En el año de 1808, el mencionado Capitán Arias, hizo un pedido de un plantío de café para sembrar en Tecosolco, 6,000 matas (de) café a un amigo, el presbítero D. José Santiago Contreras que vivía en la Havana. Llegando a Veracruz este envío de café que hicieran de Cuba el día 16 de mayo de 1808 .

En 1810, al hacer un avalúo, se registra esta hacienda como la primera plantación de todo el territorio mexicano con 31,000 plantas de café, en plena cosecha.

Posteriormente, el Capitán Arias, fallece y la viuda queda heredera de la mitad de esta propiedad. La viuda de Arias intentando salvar el alma del marido, adquiere una deuda con el clero, perdiendo su parte y parte de López Gómez, para después ser vendida a los hermanos Pasquel, por medio de la Arquidiócesis (ubicada en Puebla en aquel entonces), quien había embargado la propiedad.

Debido a que estos hermanos eran dueños de varias propiedades en diferentes estados, (según se tiene entendido); viajaban constantemente, por lo cual arrendaban parte o toda la hacienda por temporadas cuando se encontraban fuera de la propiedad. El último arrendatario es Don José María Bonilla, abuelo de Don Silvano, quien triplica el valor de la hacienda, valuada en 31,000 pesos de aquel entonces; razón por la cual, al terminar su contrato de arrendamiento, los hermanos Pasquel decidieron vender la propiedad y dividirla en tres: Hacienda la Orduña (que ahora se conoce como La Ceiba Gráfica); la Hacienda Zimpizahua (Camino a Xico) y la hacienda Consolapan (en la Carretera Antigua de Xalapa a Coatepec).

Esta última, es vendida a los Hermanos García, y es, en estas tierras, que iban desde la entrada de Xalapa hasta la entrada de Coatepec, siguiendo la carretera antigua y nueva, donde se encuentra ahora la Finca de Don Silvano, en lo denominado la zona de Zoncuantla.

La Hacienda Consolapan es comprada por dos hermanos en 1858: Jacinto y Crescencio García. Su dos siguientes generaciones nacen aun en el casco de hacienda ubicado en la zona de Consolapan. En su tercera generación, se empeñaron las tierras a Don Silvano Bonilla, él se las hereda a su hijo menor, quien se casa con una descendiente de Don Crescencio García, regresando así una vez más las tierras, en línea directa a la 5a generación García. Así es como la historia de esta finca, proviene de una historia cruzada de dos familias: Bonilla y García.

Por otra parte, Don Silvano Bonilla Rodríguez, a quien debe el nombre esta finca, nació en 1907, en la zona de Zimpizahua. Crece entre los cafetales de la primera plantación de café registrada. A los 9 años pierde a su papá y comienza trabajando como cortador de café, para poco a poco convertirse en la mano derecha de su patrón: Don Justino Torres, un hacendado de la época.

Siendo chofer de Don Justino, en sus trayectos entre la finca y la casa de este hacendado, conoció a su gran amor, quien fuese la primogénita, Doña Hermila Torres Rivera.

Para lograr conquistarla, ya que eran todavía de esos amores de ventana en la época, le escribe un libro completo de poesías, entre esas, ésta, que dice así:

Paso mi vida intranquilo, por una inmensa pasión, no te olvidaré Hermila mía, te llevo en mi corazón….

Se casan alrededor de los años 30 ́s y duran un poco más de 35 años de casados.

Su trayectoria fue muy importante en el gremio cafetalero, ya que él fue fundador de la Asociación Agrícola Local de Coatepec, quienes fueron los pioneros en exportar el café de Coatepec al mundo. El 20 de agosto de 1954, junto con 95 socios, decidieron construir un beneficio de café. Adquieren un crédito y mandan a traer tecnología de Alemania, Estados Unidos, Inglaterra y local, la cual, era tan avanzada, que ese beneficio llegó a tener la mención de ser el más moderno de toda Latinoamérica, puesto que era el único que desde que llegaba el grano en cereza, estaba totalmente automatizado el proceso, hasta salir ya clasificado y empacado directo para su exportación. Llegan a exportar 5/6 de la producción, solo 1/6 se quedaba a nivel nacional, y logra tres marcas registradas en Estados Unidos: Joya, Jade y Gema.

Lo importante de esta trayectoria, es que ayudan a consolidar el café de Coatepec como el segundo más importante del mundo, con una mención dentro de la bolsa de Nueva York, por esta calidad que manejaban: Calidad Coatepec.

Don Silvano y Doña Hermila tuvieron 5 hijos, de los cuales solo el mayor se dedicó de tiempo completo al café, al lado de su padre, desde muy temprana edad. De los otros hijos, solo el menor, quien se volvió un estudioso del café, plasmó en su tesis de licenciatura, gran parte de la trayectoria de Don Silvano.

Al morir Don Silvano, estas tierras quedan sembradas bajo el cultivo del café, pero se deja de procesar por un tiempo. Pasando varios años, casi dos décadas, estas tierras se comienzan a reactivar como finca. Para su primera cosecha, una vez reactivadas las fincas, en el año 2013, han ganado 5° lugar de calidad a nivel estatal y 1° a nivel local Coatepec, con la mención de 82 puntos sobre la escala de cafés de especialidad.

Actualmente, se pertenece a la red de investigación, denominada Café in Red, donde se tuvo la encomienda de desarrollar un proyecto empresarial que aplicara todas las investigaciones generadas en el cafetal. Es así como, nace: Tour del Café y los recorridos de La Finca de Don Silvano, ganando el segundo lugar del premio al emprendedor a nivel estatal también en 2013.

Este proyecto engloba todo lo que se puede conocer y hacer dentro de un cafetal biodiversificado, dandole un valor agregado a todos sus productos, para ser comercializados, además de posicionados dentro de las experiencias de turismo rural cafetalero.

En 2016 se registró la marca Finca de Don Silvano y se renuevan los certificados de catación de nuestras mezclas de café, obteniendo 3 de ellas, una mención de café de especialidad.

La Finca de Don Silvano, ubicada dentro del corazón del bosque mesófilo de montaña, más conocido como Bosque de Niebla; es un lugar donde además de conocer historia, cultura del café, biodiversidad del ecosistema, cultivo y proceso del café, degustarás y aprenderás a reconocer una buena taza de café.

Finca de Don Silvano… la mezcla ideal entre alma, naturaleza, pasión, tradición y café.